¿Cómo hacer un balance de situación inicial?

29 mayo, 2023

El balance de situación inicial es una herramienta básica que se implementa en los negocios para entender todas las decisiones que se han tomado durante todo un año, analizarlos y sacar conclusiones acertadas de lo que funciona y lo que se debe cambiar.

Ahora bien, ¿cómo se realiza un balance de situación inicial?

La estructura que tiene debe partir desde el reconocimiento de todos los activos y pasivos que tiene la empresa, llevando a calcular el patrimonio neto que es valor que tiene un negocio.

Cuando se trata de ver los activos, se muestran todos los medios económicos que se da para comenzar una actividad, es decir que es la circulación de fondos de una empresa y de cómo se están usando los mismos.

Por otro lado, en los pasivos y el patrimonio neto se muestra los medios financieros que presenta una empresa. O sea, es el origen de los fondos que se generaron para poder financiar el negocio.

De este modo, el valor de activos que se tenga siempre va a ser el mismo que los pasivos y el patrimonio neto, en el caso de que estos no coincidan, se debe analizar qué se está haciendo mal.

Para esto, los activos se dividen en dos:

• Activos corrientes: duran hasta un año o inferior y se destinan a las ventas. Es decir, son materias primas o productos que tienen el único objetivo de vender o facturar, también entran las deudas que tienen tus clientes con tu empresa y además el dinero en efectivo que la empresa presenta en cuentas bancarias corrientes, también se las conoce como activos circulantes.
• Activos no corrientes: tienen una duración mayor a la de un año y no son objeto de venta. Se trata de toda la maquinaria, vehículos, computadoras, terrenos, patentes, oficinas, entre otros.

En consiguiente los pasivos tienen una estructura parecida a los activos:

• Pasivos corrientes: se reconoce como las deudas y obligaciones que tiene una empresa a corto plazo, estas pueden ser: sueldos de colaboradores, pago a proveedores, deudas con el banco o impuestos que no se han pagado, entre otros.
• Pasivos no corrientes: a diferencia de las corrientes, estas son deudas que tienen un lapso de pago a largo plazo.

Por último, el patrimonio neto se lo considera como el valor que tiene una empresa, dentro de este se encuentran las aportaciones de los socios y los beneficios o ganancias que ha generado la misma.

Para saber cuánto de patrimonio neto tiene tu empresa, debes:

• Sumar todos los activos corrientes y no corrientes que tiene tu negocio
• Sacar el total del pasivo no corriente y corriente.

Dicho esto, la fórmula para calcular el valor del patrimonio neto es:

Para entender mejor, te damos un ejemplo de un negocio de ropa.

Diana es una diseñadora de modas profesional y tiene el objetivo de abrir su tienda física. El trabajo duro y constante la ha llevado a tomar la decisión de emprender su propio negocio. Sus finanzas (balance) actuales son los siguientes:

Activos:

Pasivos:

Patrimonio neto:

En resultado de análisis de las finanzas para el negocio de ropa, se puede observar que el patrimonio es mayor a los pasivos que cuenta Diana, por lo tanto, su empresa puede empezar a financiarse sin ningún problema, ya que cuenta con ahorros propios.

Si estás pensando en iniciar tu negocio como Diana, Banco Internacional es la mejor opción. Aplica al Crédito Comercial y potencia tu empresa eficiente y segura.

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